VIH: el nuevo examen para saber si eres portador del virus

Cada 1 de diciembre se conmemora el Día Internacional de la Acción contra el Sida, establecido en 1988 por la Organización Mundial de la Salud con el fin de dar a conocer los avances en el tema.

Si bien con los años de estudio y el avance de la tecnología en medicina el virus de inmunodeficencia humana (VIH) ha dejado de considerarse como una enfermedad mortal y se ha convertido en una de tipo crónica y controlable a nivel mundial, aún queda mucho por hacer.

Cada 10 segundos se produce una nueva infección, por lo que su detección temprana se vuelve prioridad para evitar que el virus entre a una etapa de mayor riesgo.

En nuestro país, según lo confirma la Fundación APROFA (Asociación Chilena de Protección de la Familia), se estima que entre un 40 y 50% de las personas que viven con VIH no lo saben, y hasta el día de hoy existe un estigma asociado al hecho de tomarse el examen que detecta el virus.

"En Chile continúa la idea de que tomarse el examen indica que estás haciendo algo malo, siendo que debería ser todo al revés, te hace un ser responsable. Tomarse un examen de detección de VIH no pone en riesgo a la persona ni la hace más promiscua", enfatiza el médico David Palma, consultor del Área de VIH de APROFA.

Lo que el común de las personas no sabe, es que hoy en día el reconocido Test Elisa ya no es la única alternativa para saber si portas o no el virus. Otra opción, hasta ahora muy poco difundida, es el test rápido. ¿En qué consiste? Es un procedimiento que toma solo 15 minutos en dar los resultados luego de un pinchazo en el dedo, a diferencia del test Elisa que tarda 2 semanas. "Se trata de una alternativa económica, eficiente especialmente para detectar a personas negativas, e ir limpiando esa nebulosa de personas cuyo estado desconocemos", explica David Palma.

Países como España, Francia y Estados Unidos ya lo han implementado, así como también México, Colombia, Argentina y Uruguay, ya que su mayor potencial es su característica comunitaria, muy lejos de algo tan protocolar y de difícil acceso. Lo mejor es que no existe solo un test rápido, sino que hay de diferentes marcas. Si bien aun no es posible comprarlo en farmacias, su valor es de $15.000 pesos y puede conseguirse en centros privados de diagnóstico rápido. Este test debe ser tomado ahí mismo, pues se acompaña de un proceso de consejería a pre y post toma del examen, todo en el marco de una estrategia de prevención integral.

"Hacerse el examen es de suma importancia. Hay que entender que si sale positivo, es bueno que lo sepas ahora y no cuando tengas una enfermedad avanzada con complicaciones, porque así es posible aplicar de inmediato todo el protocolo. Ser notificado como VIH positivo no es una sentencia de muerte, puesto que con una correcta adherencia al tratamiento, la salud seguirá idéntica a si no fuera portador del virus", refuerza el médico.

El objetivo de los profesionales está claro y el fin es motivar a tomarse el examen.