Courtney Cox se sacó el bótox de la cara y así se ve ahora
Finalmente tomó la decisión que muchos esperaban hace tiempo. Se vio en el espejó, no le gustó y lo eliminó de su vida.
Cuando la actriz de Friends empezó a incursionar en el mundo del bótox y el retoque quirúrgico, claramente no pasó inadvertida y el relleno facial se le fue de las manos.
La actriz de 53 años confesó lo difícil que es envejecer, sobre todo si se trata de Hollywood. Y luego de años de bisturí para mantener un look más joven, ella misma ha reconoció que dejó atrás esa etapa y que hoy prefiere verse lo más natural posible.
Todo esto lo comentó en la entrevista que dio a la revista New Beauty, donde por primera vez expone su descontento tras una serie de inyecciones faciales que se puso el año pasado.
¿Cuáles fueron las medidas que tomó la ex 'Mónica Geller'? Como ella misma comentó, "Me disolvieron los implantes del relleno", y agregó, "Me siento mejor porque parezco yo misma. Creo que ahora me parezco más a la persona que era. Las cosas van a cambiar. Todo caerá. Estaba tratando de que no cayera, pero eso me dio un aspecto falso".
Nada natural se puede hacer contra la gravedad, y la protagonista de Friends así lo entendió. Asume que sus decisiones no fueron las correctas y que se necesita tener expresión en la cara. "Creo que envejecer es difícil en general. Me siento como si tuviera 34 años, así que la idea de que no los tengo no parece natural. No lo entiendo. Me siento mejor de lo que me he sentido en toda mi vida. Me cuido mucho más ahora".
La industria de la televisión y el cine no es fácil, y los actores lo saben. Courtney Cox lo vivió en persona y la presión de "seguir vigente" la llevo a elegir el camino equivocado para su cuerpo. "Crecí pensando que la apariencia era lo más importante y es muy triste porque me metí en problemas. Estuve trabajando duro por mantenerme, pero en realidad, empeoró las cosas, lamentó en la entrevista.
Y por si fuera poco, es muy fácil, como ella dice, caen en la cirugía estética, sobre todo si se tiene la billetera para hacerlo una y otra vez. Es una solución rápida, pero, lamentablemente, como una bola de nieve. "La primera vez sales contenta porque apenas se nota y luego repites y así varias veces hasta que te ves en una foto y dices 'Ups, esto es horrible' ".
Y eso es exactamente lo que le ocurrió a Cox. No le gustó lo que vio y decidió renunciar a ese tipo de "belleza". Sobre la presión de la fama y su obsesión por verse joven...siempre, ya había hablado antes también en el programa de televisión Running Wild With Bear Grylls. (la foto de arriba)
Ahora prefiere verse natural, antes que volver a ver una aguja cerca de su cara. Así se ve ahora.