El príncipe William celebró sus 42 años en concierto de Taylor Swift

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Equipo M360
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El heredero al trono fue etiquetado en una publicación por la cantante

El mundo del pop y la realeza británica se fusionaron en una noche mágica cuando Taylor Swift dio inicio a su esperada serie de conciertos en Londres. La cantante estadounidense no solo conquistó el corazón de sus fans, sino que también atrajo la atención de la familia real británica, quienes demostraron ser auténticos "Swifties".


El espectáculo comenzó incluso antes de que Swift pisara el escenario. En un gesto sin precedentes, la guardia real sorprendió a los transeúntes y turistas en Buckingham Palace con una interpretación de "Shake It Off" durante el cambio de guardia. Este momento único fue compartido rápidamente a través de las redes sociales oficiales de la familia real.


Pero la verdadera sorpresa de la noche estaba por llegar. El príncipe William, heredero al trono británico, eligió celebrar su 42º cumpleaños de una manera especial: asistiendo al concierto de Swift en el icónico estadio de Wembley junto a sus hijos, los príncipes George, Charlotte y Louis. La familia real ocupó un palco privado, desde donde disfrutaron del espectáculo en un ambiente más íntimo.


Esta aparición no solo marcó un momento significativo para los jóvenes príncipes, sino que también evocó recuerdos de hace una década. En 2013, el entonces duque de Cambridge compartió escenario con Taylor Swift y Jon Bon Jovi en una gala benéfica en el palacio de Kensington, donde interpretaron juntos "Livin' on a Prayer". Este concierto en Wembley parece ser una continuación de esa relación especial entre Swift y la familia real.


La presencia de la realeza en el concierto no pasó desapercibida para los fans, quienes rápidamente compartieron en redes sociales su emoción al ver a los futuros herederos del trono disfrutando de la música pop. Este gesto ha sido interpretado como un intento de la familia real por conectar con las generaciones más jóvenes y mostrar un lado más accesible y moderno de la monarquía.