Angélica Sepúlveda entregó detalles de la polémica comida con hongos en GH
La Fierecilla de Yungay reveló que consume fermentados hace algunos años
Uno de los mayores conflictos de Angélica Sepúlveda en Gran Hermano se debió a un polémico plato con hongos que la Fierecilla de Yungay tenía en la pieza de la casa más famosa del mundo.
El supuesto olor que salía del plato provocó una gran pelea en el reality, particularmente con Chama y Manuel, evento que se salió de las manos y provocó que los tres participantes fueran sancionados y enviados directo a placa.
Tras la renuncia de Sepúlveda a Gran Hermano, el domingo pasado, la chica reality explicó bien qué contenía el recipiente que fermentaba en el plato.
"Ese plato fue que eché unas cuatro o cinco cucharadas de lentejas bien lavadas que puse en vinagree de alcohol que había en la casa. Las tapé con una servilleta y no generaba ningún olor (...) No son alimentos hediondos. Yo dije que el olor que había en la pieza era de Manuel que no sé qué come. El se aprovechó que vio mi plato y maximizó toda la situación", señaló Angélica a LUN.
¿Qué come la Fierecilla de Yungay?
La chica reality explicó al medio que hace algunos años conoció las bondades de los fermentados y desde entonces los incluyó en su alimentación.
"Son comidas muy sanas que las tenemos súper integradas en mi familia (...) Las verduras fermentadas puedes molerlas e integrarlas a una hgamburguesa, o mezclarla con quínoa o en una ensalada. Yo comía lentejas fermentadas todos los días. Le saco el moho que se le forma, lo aliño con una cucharadita de miel o algo y listo", explicó.
La Fierecilla de Yungay detalló que consumir alimentos fermentados tiene grandes beneficios para su organismo, pues le entregan mucha energía y mejoran el aspecto de su piel. Además, aseguró que en otros realities también practicó la fermentación y que sus compañeros comían de sus preparaciones.
"En Tierra Brava nos llevaban lista la comida, sólo debíamos prepararnos el desayuno. En 1810 (2009) también fermentaba alimentos y todos comían en las ensaladas, hasta Arturo Longton, y nadie reclamó", expresó.