Hija de Mauricio Israel habla del abandono de su padre: "A punto de morir"
En un crudo testimonio, Sara, la hija de 18 años del periodista Mauricio Israel, se sinceró en el estelar "Primer Plano" sobre su compleja relación con su padre, la grave enfermedad que casi le cuesta la vida y el profundo sentimiento de abandono que experimentó en su peor momento.
La joven, fruto de la relación del comentarista con Marisol Gálvez, contó que no ve a su padre desde 2019. Sin embargo, fue durante una crisis de salud este año cuando su ausencia se hizo más dolorosa que nunca.
Una lucha contra el tiempo
Sara reveló que sufre de insuficiencia cardíaca y taquicardias supraventriculares, una condición que se agravó drásticamente en los últimos meses. "Yo el 2022 empecé con taquicardias, yo pensé que era normal por el ejercicio y no le tomé el peso, hasta que un día empecé mal y me hospitalizaron en 2023", comenzó contando.
En mayo de este año, la situación se volvió crítica. "Me desmayé dos veces y mi mamá llamó a la ambulancia. Le dijeron: 'Tiene que hospitalizarla urgente porque está grave'".
La joven fue operada de urgencia en una intervención compleja. "Hubo una intervención que fue por la ingle, donde tuvieron que hacer un corte y me metieron 12 sondas", recordó, añadiendo que sintió que su vida se acababa: "Me empecé a ir a negro y dije ya, hasta aquí llegué".
El momento más desgarrador de su relato fue al despertar de la cirugía. En ese instante de vulnerabilidad, solo anhelaba una cosa: el apoyo de su padre.
"Después desperté y recé para que mi papá estuviera ahí en la pieza con mi mamá esperando, pero estaba mi hermana y mi madre", lamentó. La decepción fue aún mayor al saber que él estaba al tanto de la situación. "A mi papá le avisaron, le dijeron, pero no apareció".
Una millonaria deuda
Además del costo emocional, la operación dejó a la familia con una millonaria deuda. Esta situación llevó a su madre, Marisol Gálvez, a tomar una drástica decisión en junio: abrir una cuenta en la plataforma para adultos Arsmate. "Exploto mi lado sensual, lúdico, que he postergado por los problemas económicos. Hoy digo, basta", expresó ella en ese entonces, luchando por costear los gastos médicos frente a los 300 mil pesos mensuales que recibiría del comunicador.
Hoy, Sara asegura estar "bien de salud", aunque sigue con taquicardias y fue diagnosticada con disautonomía.