¿Qué debes hacer si sufres de estrés laboral?

Por Carol Caro @karolglam | Miércoles, 10 de Abril de 2019
¿Qué debes hacer si sufres de estrés laboral?

Muchas veces nos sentimos estresados con nuestros trabajos y otras labores que nos exigen la sociedad. Ante este escenario, es imposible no vernos con desánimo e incluso hay muchas personas que llegan a experimentar enfermedades mentales, como la depresión a causa de estas situaciones.

El síndrome de burnout es un tipo de estrés laboral, caracterizado por el agotamiento físico, mental y emocional, relacionado a la labor profesional que se ejerce y cuyas consecuencias son la pérdida del interés en las tareas y responsabilidades e incluso la depresión.

Personas que recurrentemente presentan síntomas físicos como cansancio, fatiga, lentitud, dolor de cabeza, de cuello y de espalda, o que presenta licencias médicas con frecuencia, ausentismo o retraso, puede que estén presentando el Síndrome de Desgaste Laboral del Burnout, es decir, "quemarse" debido al oficio o profesión.

En este contexto, la médico antroposófica Socorro Cordeiro, quien es docente de la carrera de Psicología de la Universidad del Pacífico, comenta que desde los postulados de la antroposofía de Rudolf Steiner, hay determinadas herramientas que pueden ser útiles en el autocuidado.

Algunos de ellos son ejercicios para fortalecer la vida anímica y que, al ponerlos en práctica de manera permanente, permite fortalecer la conciencia, la concentración, la voluntad, como el poder mirar la vida de manera más positiva, entre otros.

"El ejercicio es que tú tomas un objeto, comenzando con una descripción perceptiva para después ir a lo relacionado con su función, que tipo de objeto es, cuándo fue creado, para qué sirve, de qué materia está compuesto, etc. Y lo que haces es una línea de pensamiento en torno a un objeto, por medio de un orden del pensamiento que estás siguiendo y que es finalmente, el querer conocer a ese objeto. Este es un ejercicio que sirve para hacernos dueños de nuestros pensamientos y que, además, sirve para la práctica del paciente, para poner atención en lo que el paciente dice y no que a partir de lo que dice comenzar a elucubrar otras ideas.

Para la médico antroposófica, este es un ejercicio que ayuda a fortalecer la individualidad al nivel del pensar, pero que sin embargo requiere de algunos requisitos como:

• Uno debe querer hacerlo

• Debe idealmente hacerse en forma diaria. Está bien hacerlo todos los días de la semana, pero uno la visualiza y sabe que hay un día que no se podrá, es mejor no hacerlo, y proponerse tres días a la semana, por ejemplo. La idea es hacerse cargo y ser dueño de la situación.

• Se recomienda hacerlo en la mañana. Porque si lo dejas para la noche o puede que el cansancio te venza o que te despeje y no puedas dormir.

• El tiempo puede ser de 3 minutos, pero sin distracciones. Y si uno pierde el hilo, la idea es empezar de nuevo, que no haya distracciones con cosas cotidianas.

• La idea es con un objeto concreto y no abstracto. Porque de la otra manera la distracción es mucho mayor. Un objeto concreto en sí, facilita la práctica meditativa. El objeto es un facilitador, para prepararse para lo que es más difícil, como son las palabras o las frases.

El segundo ejercicio propuesto por la especialista es el relacionado con la Voluntad. "Este consiste en escoger una acción que hacer, no obligatoria y más bien inútil, como puede ser rascarse la rodilla, y donde se define además una hora determinada, pero sin uso de recordatorios externos como el celular, para empezar a estar más pendiente de lo que pasa en el día, a nuestro alrededor. Este ejercicio, permite que nos fortalezcamos tanto uno como a muchas otras personas, si uno lo hace con cierta conciencia, al comentarles que son los actos que yo me estoy proponiendo. Y si uno hace ese ejercicio con esa conciencia, lo que sucederá es que después de un tiempo, uno ya siente que puede hacer más y tener más fuerza para proponerse ciertas cosas u otras metas", concluye

 

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