China Suárez compartió fotos de sus hijos en su primer día de escuela en Turquía

Mientras Eugenia "China" Suárez celebra con orgullo la exitosa adaptación de sus tres hijos a su nueva vida en Turquía, el padre de los menores, Benjamín Vicuña, vive la otra cara de la moneda.
La noticia surgió luego de que la actriz argentina compartiera en sus redes sociales el importante hito de sus hijos: su primer día de clases en un colegio en Estambul.
El orgullo de una madre
A través de sus historias de Instagram, la "China" publicó fotos de Rufina, Magnolia y Amancio luciendo sus nuevos uniformes escolares, junto a un emotivo mensaje. "Estoy orgullosa de ustedes. Tan feliz de verlos siempre unidos, aprendiendo nuevos idiomas, nuevas culturas, haciendo nuevos amigos", escribió. "Los amo con toda mi alma. Dos semanas en un nuevo colegio, adaptadísimos, felices", agregó.
La adaptación parece ir viento en popa, especialmente para la hija mayor, Rufina (fruto de su relación con Nicolás Cabré), quien ya sorprende con su manejo del idioma local. "Aprendiendo turco", escribió Suárez junto a un video donde se ve a la adolescente de 12 años diciendo los números ordinales con fluidez.
La difícil confesión de Benjamín Vicuña
Pero mientras en Estambul todo es felicidad y nuevos aprendizajes, la situación se vive de una manera muy diferente para Benjamín Vicuña. El actor, que se mudó a Argentina precisamente para estar cerca de sus hijos, habló con la prensa sobre sus sentimientos.
"Es difícil adaptarse y acomodarse a esta nueva vida. Pero bueno, nada, haciendo lo posible por entender y acoplarme a la nueva forma y el bienestar de mis hijos", manifestó. "Yo trato de desdramatizar, trato de entender que lo importante pasa por otro lado. De adaptarme a estas cosas y tratar de encontrarle un orden pronto, por el bien de los chicos y de todos los que estamos acá", continuó.
Recordando su gran sacrificio personal, Vicuña fue enfático: "Me vine a vivir a Argentina por mis hijos, eso no es ninguna novedad. Eso es un hecho, es real".
Finalmente, el actor cerró con una frase que resume su angustia y la complejidad del momento que atraviesa: "Este nuevo orden de cosas me hace pensar mucho, me hace planificarme, pero es todo demasiado".